El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) ha destapado una serie de mentiras y engaños por parte del gobierno de Samuel García en relación con el estado del transporte público en Nuevo León. Según el reciente estudio, este estado se sitúa en el penúltimo lugar a nivel nacional en términos de calidad y eficiencia del transporte, lo que contradice las afirmaciones triunfalistas del gobernador.
Gobierno de Samuel García no ha Sabido Manejar el Problema
Desde la llegada de Samuel García al gobierno, todas las métricas relacionadas con el transporte público han experimentado un marcado deterioro. Los tiempos de espera para abordar un camión se han prolongado considerablemente, dejando a los neoloneses cada vez más frustrados y descontentos. A pesar de las promesas de mejoría por parte de las autoridades estatales y las supuestas adquisiciones de dos mil nuevos camiones, la realidad en las calles de Nuevo León no ha cambiado significativamente.
Surge entonces la pregunta inevitable: ¿dónde están esos dos mil camiones nuevos anunciados por Samuel García? Algunos ciudadanos no pueden evitar sospechar que estos vehículos podrían estar siendo utilizados para propósitos ajenos al transporte público, como el traslado masivo de personas a eventos políticos o sociales vinculados a Mariana Rodríguez, esposa del gobernador.
Nuevo León Sigue sin Buen Transporte Público
El panorama es desolador. Mientras las autoridades intentan desviar la atención con promesas vacías y declaraciones grandilocuentes, los ciudadanos de Nuevo León continúan enfrentando dificultades para movilizarse de manera eficiente y segura por la ciudad. La situación demanda acciones concretas y honestas por parte del gobierno, que prioricen las necesidades reales de la población por encima de intereses políticos o personales.
El informe del INEGI no deja lugar a dudas: el transporte público en Nuevo León es un desastre que requiere una atención urgente y un cambio de rumbo en las políticas gubernamentales. Los ciudadanos merecen un servicio digno y eficiente que les permita desplazarse sin contratiempos por su estado, y es responsabilidad de las autoridades garantizarlo.