En el reciente proceso electoral, Samuel García ha experimentado una de las peores derrotas políticas, a pesar de no haber estado en las boletas electorales. Los resultados no solo afectan su posición y la de su partido, Movimiento Ciudadano, sino que también plantean serias dudas sobre su futuro político.
Derrota en las Diputaciones Locales
El pasado 2 de junio, se llevaron a cabo elecciones que resultaron ser un duro golpe para Samuel García y su partido. De las 46 diputaciones locales para el Congreso, Movimiento Ciudadano solo logró obtener cinco. Este resultado no solo representa una pérdida significativa en términos de representación política, sino que también pone en peligro la estabilidad de García como gobernador.
García enfrenta un juicio político por no haber presentado los presupuestos de egresos 2023-2024, y la pérdida de apoyo en el Congreso podría facilitar su destitución. La falta de representación en el Congreso complica la capacidad de Movimiento Ciudadano para defender a García de las acusaciones y mantener su posición en el gobierno estatal.
Samuel García, el gran perdedor
La derrota electoral tiene un impacto profundo tanto personal como político para Samuel García. Mariana Rodríguez, su esposa, perdió la alcaldía de Monterrey, un resultado que debió haber sido particularmente doloroso para García. La falta de victorias en los distritos locales agrava aún más la situación, dejando al Congreso en manos de sus adversarios políticos.
Con un Congreso mayoritariamente en contra, las perspectivas de García de sobrevivir al juicio político se ven sombrías. La interrupción del juicio político podría reanudarse, y sin el respaldo necesario en el Congreso, García enfrenta la posibilidad real de ser destituido de su cargo. Esto marca uno de los momentos más difíciles para Movimiento Ciudadano desde que García ganó las elecciones en Nuevo León, y plantea la pregunta de si García podría incluso enfrentar consecuencias legales más serias.