El Gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha sido objeto de múltiples acusaciones que cuestionan su integridad y la legalidad de sus acciones. Una de las más graves es la relacionada con terrenos ilegales que, según García, fueron un regalo del Grupo Gentor por los servicios que su despacho jurídico supuestamente prestó a la empresa. Sin embargo, esta versión se desmorona ante las evidencias y declaraciones de las partes involucradas.
Samuel García Se Defiende con Mentiras
Según Samuel García, estos terrenos fueron entregados como “daciones de pago” debido a que su despacho, Firma Jurídica y Fiscal, le ahorró al Grupo Gentor más de 20 mil millones de pesos en créditos fiscales. Sin embargo, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha afirmado que no existe registro alguno de tales operaciones. Además, el Grupo Gentor ha declarado que las afirmaciones de García son falsas e imprecisas, desmintiendo cualquier tipo de transacción de esa naturaleza.
La falta de transparencia y la contradicción en las declaraciones del Gobernador levantan serias dudas sobre la veracidad de sus afirmaciones. La herramienta de consultas del SAT y el portal del Tribunal Federal de Justicia Administrativa no muestran registros de los supuestos créditos fiscales o sentencias relacionadas con tales montos. El monto mencionado por García supera con creces los cobros fiscales a grandes corporativos como Femsa y América Móvil, lo que hace su declaración aún más sospechosa.
Crece Percepción de Corrupción en Nuevo León
El caso de Samuel García es emblemático de una creciente percepción de corrupción en su administración. En el 2023, se descubrió que García había adquirido un terreno de casi 18 hectáreas en Mesa de la Corona, valuado entre 700 millones y 1,200 millones de pesos. Este terreno está destinado a la construcción de una mansión de 2,775 metros cuadrados, lo que contrasta fuertemente con sus ingresos oficiales. Además, en años anteriores, García adquirió propiedades valuadas en decenas de millones de pesos, las cuales también atribuyó a “daciones de pago” del Grupo Gentor.
Estas adquisiciones no son casos aislados. Las empresas de García, Firma Jurídica y Fiscal, y SAGA Tierras y Bienes Inmuebles, han experimentado un aumento exorbitante en sus ingresos desde que García inició su carrera política en 2015. Los ingresos se han multiplicado hasta 360 veces, lo que representa un aumento del 36,000%. Este crecimiento desproporcionado sugiere posibles prácticas ilícitas y un uso indebido de su posición para enriquecimiento personal.
El camino de Samuel García está plagado de mentiras y contradicciones. La falta de transparencia y la ausencia de registros oficiales respaldan la necesidad de una investigación exhaustiva y una rendición de cuentas por parte del Gobernador. Es imprescindible que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto para esclarecer estas acusaciones y garantizar que no haya impunidad en los actos de corrupción.
La ciudadanía de Nuevo León merece un liderazgo honesto y transparente. La confianza en las instituciones y en los funcionarios públicos es fundamental para el buen funcionamiento de la democracia. Por ello, es crucial que Samuel García enfrente las consecuencias de sus acciones y que se establezcan mecanismos efectivos para prevenir y sancionar la corrupción en todos los niveles de gobierno. La rendición de cuentas no es opcional, es una obligación de todo servidor público.
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