El personaje favorito de los morenistas es Samuel García: tanto Arturo Zaldívar, AMLO y Claudia Sheinbaum lo han defendido públicamente o recibido en sus oficinas en tiempos de crisis. ¿Así o más evidente la alianza?
Samuel García, protegido de Morena
La casualidad juega de maneras misteriosas. Después de la visita de Samuel García a la presidenta electa Claudia Sheinbaum, los morenistas han comenzado a defender al emecista. Como muestra, tenemos lo que dijo Arturo Zaldívar con Ciro Gómez Leyva, donde pintaba a Samuel como la víctima en la crisis política que vivió Nuevo León en diciembre y que llevó al gobernador a renunciar a sus aspiraciones presidenciales. ¿Por qué defender lo indefendible?
La alianza entre Samuel García y Morena se ha vuelto evidente en los últimos meses. La defensa pública y el apoyo recibido por parte de figuras prominentes de Morena, como el presidente Andrés Manuel López Obrador, la presidenta electa Claudia Sheinbaum y el exministro Arturo Zaldívar, han dejado en claro la cercanía entre el gobernador de Nuevo León y el partido en el poder.
La crisis política que azotó a Nuevo León en diciembre, que culminó con la renuncia de Samuel García a sus aspiraciones presidenciales, fue un momento crucial. En medio de este tumulto, las declaraciones de Zaldívar a Ciro Gómez Leyva, presentando a García como una víctima de las circunstancias, resaltaron el respaldo que el gobernador ha recibido de altos mandos de Morena.
La defensa de Arturo Zaldívar
Arturo Zaldívar, exministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, no escatimó en palabras al describir la situación de Samuel García durante su entrevista con Ciro Gómez Leyva. Zaldívar, conocido por su integridad y claridad en asuntos judiciales, sorprendió a muchos al tomar una postura tan firme en defensa de García.
Zaldívar argumentó que la crisis política en Nuevo León, que llevó a Samuel García a renunciar a sus aspiraciones presidenciales, fue una maniobra injusta y politizada. Describió a García como una víctima de fuerzas que intentaban desestabilizar su gobierno y su carrera política. Esta defensa pública por parte de una figura tan respetada añadió peso a la percepción de una alianza entre García y Morena.
El apoyo de Zaldívar no se limitó a palabras. Su disposición a respaldar públicamente a García, incluso en momentos de alta tensión política, sugirió una relación de confianza y colaboración que va más allá de simples coincidencias. La defensa de Zaldívar fue vista por muchos como un claro indicio de que García tenía aliados poderosos dentro de Morena, dispuestos a apoyarlo en momentos críticos.